En la que se presentaba como la operación de deuda más dura del año luego de la baja en los precios de los bonos CER, el Tesoro logró renovar todos los vencimientos con un pequeño margen. Así, la estrategia de reconstrucción de la capacidad de financiamiento en moneda local del fisco logró pasar una prueba.

El Ministerio de Economía logro financiamiento por $248.078 millones que alcanzaron, con pequeño margen, para cubrir vencimientos por $243.701 millones. 

Tras las bajas en los precios de los bonos CER, principal instrumento que utiliza el Gobierno para cubrir sus necesidades de financiamiento en pesos, el mercado se movía con la duda respecto a si el crédito se había terminado.

Economía tuvo que subir fuertemente las tasas y acortar los plazos para poder cerrar la operación. Las letras a descuento se colocaron a una tasa del 58%, seis puntos por encima de lo que pagan las Leliq del Banco Central. Mientras que las letras ajustadas por CER cerraron a tasas del orden del 2,5% al 3,5% por encima del ajuste por inflación. 

Se colocaron 9 instrumentos entre Letras a Descuento, Letras CER y letras dollar linked. Del total de financiamiento obtenido, el 85% correspondió a instrumentos con vencimiento en 2022 y, el 15% restante, al instrumento vinculado al dólar con vencimiento en 2023. Asimismo, el 51% del monto adjudicado fue en instrumentos ajustables por CER, el 34% en instrumentos a tasa fija y, el 15% restante en instrumentos dollar linked.

Para lograr este resultado, además, el Tesoro contó con el apoyo del Banco Central que redujo a la mitad los vencimientos del mes con compras de títulos en el mercy secundario y su posterior canje por emisiones de mayor plazo.

La próxima licitación de deuda en pesos es el 13 de julio y la capacidad de Gobierno de captar más financiamiento será clave para prever el destino del programa financiero en los meses por venir.